¡Síguenos!¿Sabías que el 70% de los autos nuevos que se venden en el país, se adquieren a través de algún tipo de financiamiento?
TwittearVisitas: 3341
Cuando el auto es robado durante la primera mitad del plazo del crédito, los seguros le pagan al dueño legal del vehículo, que en este caso es el acreedor, señaló Marco Ascencio de la Rosa, director de operaciones de Lo Jack.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), en el primer trimestre de este año se robaron 222 mil 500 vehículos asegurados, la cifra más alta desde que se tiene registro.
¿Cuánto pierdo si roban mi coche?
Marco Ascencio de la Rosa, director de operaciones de Lo Jack, dice que para un vehículo de 400 mil pesos adquirido con un crédito a tres años a una tasa de 10%, es probable que el comprador haya pagado el 15% de enganche ($60 mil pesos), más 12 mil pesos como pago de tenencia y 16 mil pesos de la primera mensualidad. De inicio, el cliente habría dado 88 mil pesos, aproximadamente.
Supongamos que en los próximos 11 meses, se aportan 176 mil pesos sólo en mensualidades, cantidad que se suma a los 88 mil pesos pagados al inicio del crédito. En total, habría pagado 264 mil pesos.
Si ese mismo vehículo es robado al año de haberlo sacado de la agencia, el seguro contratado a valor factura pagaría 400 mil pesos, menos el 10% de deducible. El acreedor, es decir la institución que financió la compra del vehículo –propietario legal de la unidad– recibiría un cheque por 300 mil pesos. Este dinero debería sumarse a los 264 mil pesos abonados, con lo que sería suficiente para liquidar el crédito de la unidad.
Sin embargo, debido a que las primeras mensualidades del crédito se canalizan al pago de intereses, es muy probable que al final el comprador reciba un cheque menor al monto invertido al principio. Es decir una cifra menor al enganche y a la tenencia.
Si ese mismo vehículo es robado al año de haberlo sacado de la agencia, el seguro contratado a valor factura pagaría 400 mil pesos, menos el 10% de deducible. El acreedor, es decir la institución que financió la compra del vehículo –propietario legal de la unidad– recibiría un cheque por 300 mil pesos. Este dinero debería sumarse a los 264 mil pesos abonados, con lo que sería suficiente para liquidar el crédito de la unidad.
Sin embargo, debido a que las primeras mensualidades del crédito se canalizan al pago de intereses, es muy probable que al final el comprador reciba un cheque menor al monto invertido al principio. Es decir una cifra menor al enganche y a la tenencia.