¡Síguenos!Alimentar a mascotas con comida de casa o con golosinas para humanos les puede generar problemas metabólicos, óseos y obesidad, e incluso existen alimentos tóxicos que pueden ocasionarles la muerte, advirtió Beremiz Sánchez, experto en Ortopedia del Hospital Veterinario de la Universidad del Valle de México (UVM), durante el Congreso de especialidades veterinarias de esta casa de estudios.
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El doctor Sánchez, quien encabezó el congreso con una exposición sobre la especialidad de Ortopedia, hizo énfasis en la alimentación de las mascotas, pues dijo que es común que sus dueños les den de comer alimentos de casa, lo que origina problemas nutricionales que los llevan a condiciones de fracturas o a desórdenes metabólicos que ocasionan que la estructura de los huesos no sea la correcta.
Chocolate y cebolla, tóxicos para ellos...
Detalló que existen alimentos extremadamente tóxicos para las mascotas, como el chocolate, ya que la ingesta de 300 gramos por parte de un perro puede ocasionar la muerte del animal, debido a que genera daño hepático y situaciones adversas; otro alimento de riesgo tanto para perros como para gatos, es la cebolla.
Hiperparatiroidismo nutricional...
El experto en Ortopedia Veterinaria explicó que uno de los padecimientos óseos comunes derivado de una mala alimentación, es el hiperparatiroidismo nutricional secundario, que implica un desbalance en la absorción de calcio y fósforo, de modo que, al tener disminución de calcio en el hueso, este es frágil y propenso a fracturarse.
Este padecimiento es frecuente en cachorros y se ha encontrado que surge debido a que los dueños sólo les dan leche y en ocasiones calcio y vitaminas, porque creen que con ello obtendrán una buena formación de estructuras óseas; sin embargo, no es así.
Mandíbula de goma...
Agregó que otro de los padecimientos causados por la descalcificación es el síndrome de mandíbula de goma, que se trata del ablandamiento de esa parte.
Fracturas...
También existen fracturas de tipo patológico que se desarrollan por tumores que afectan el hueso, mientras que algunos perros de edad avanzada desarrollan el hiperparatiroidismo renal secundario, que deriva en insuficiencia renal, debido a que no tienen una capacidad de absorción adecuada de estos minerales.
